¿Obstinad@ yo?

“Ustedes respondieron y dijeron: “Hemos pecado en contra del SEÑOR. Iremos y pelearemos así como el SEÑOR nuestro Dios nos ordenó”. Entonces ustedes se prepararon para la batalla y pensaron que sería fácil subir a la región montañosa. »El SEÑOR me dijo que les avisara: “No suban a pelear porque yo no estoy entre ustedes. Si me hacen caso, entonces no morirán ante sus enemigos”. »Yo les hablé, pero ustedes no me quisieron escuchar. Se rebelaron en contra de la advertencia del SEÑOR, y arrogantes fueron a la región montañosa. Los amorreos, que vivían allí, salieron a enfrentarlos como un enjambre de abejas, los persiguieron y los vencieron en Seir hasta Jormá. Entonces ustedes volvieron y lloraron ante el SEÑOR, pero el SEÑOR no les prestó atención ni los escuchó,”

Deuteronomio 1:41-45 PDT

El pueblo de Israel estaba en la conquista, pero por el reporte de los espías, ellos se desalentaron y maldijeron, Dios se arrepintió de darles la tierra y les dijo que no entrarían. Cuando se vieron perdidos y sin Dios, quisieron conquistar, pero Dios les dijo que no lo hicieran porque Él no estaría con ellos, pero no escucharon y se obstinaron.

Obstinación: Es terquedad, tomar una posición y llevarla a cabo a pesar de las consecuencias o advertencias.

¿Cuántas veces en nuestros sentimientos hemos sido obstinados?, no hacemos las cosas bien y esto nos lleva a tomar decisiones sin la dirección del Señor. Muchos inician relaciones sentimentales basados en el sentimiento de obstinación, aunque todo alrededor les decía que no, aun así continúan, algunos llegan al punto de tal obstinación que se casan pensando que así ganan y demuestran su amor a toda costa, pero no se dan cuenta de que Dios había advertido que Él no estaría con ellos, el pueblo de Israel murió en batalla y tuvieron que huir porque Dios ya no estaba. La pregunta aquí es ¿A qué costo quieres hacer las cosas? ¿A qué costo quieres aprender?

Cuando una pareja se casa por obstinación o comienza una relación fuera de tiempo, cada vez que tienen una pelea, una diferencia o enfrentan problemas, sus pensamientos siempre irán dirigidos a que lo están viviendo es consecuencia de haber hecho las cosas mal y no obedecer, no tendrán paz aunque intenten mantener una imagen ante los demás de que todo está bien. Puedes mentir a los de afuera, pero jamás le mentirás a tu corazón. Dios no puede ser burlado, todo lo que el hombre coseche eso también segará.

Hay una palabra que es muy específica en cuanto a obstinarnos y está en Deuteronomio 11:26-28 PDT

 “»Hoy les estoy dando a elegir entre bendición y maldición. La bendición, si obedecen los mandamientos del SEÑOR su Dios que hoy les ordenó; y la maldición, si no obedecen los mandamientos del SEÑOR su Dios, si dejan de vivir de la manera que hoy les ordenó y si siguen otros dioses que no habían conocido.”

Habla de Dos caminos:

 Bendición: Beneficios espirituales que una persona puede gozar y hacen que esa persona tenga un bien.

Maldición: Carga espiritual que persigue y acecha a una persona de un lado a otro y trae consecuencias a la persona negativos y totalmente destructivos.

La mayoría de las personas saben qué hay bendición y maldición, saben que existe y que es real, porque aunque no lo puedan definir bien saben que la maldición es algo malo. Dios les presentaba dos caminos al pueblo de Israel, toda la bendición estaba a su disposición; El Señor les estaba entregando una tierra buena y fructífera, pero más que la tierra encerraba una bendición integral, salud, prosperidad en todas las áreas, la presencia de Dios, todo. Solo tenían que hacer 1 cosa y era obedecer los mandamientos, solo obediencia es lo que pide Dios de nosotros, pero nuestra naturaleza es desobediente, obstinada y el pueblo de Israel prefirió la maldición.

Y decimos cómo pudieron hacer eso, pero cuántas veces tú sabes que lo qué haces esta mal, y aún así lo sigues haciendo, estas escogiendo el camino de la maldición y no te das cuenta del final. Solo hay un camino para tener un buen final y es cuando escogemos la bendición; pero la bendición nos costará dejar de hacer lo que queremos por hacer lo que Dios quiere, es dejar mis caminos y mis decisiones por seguir SU camino.

La decisión de tu matrimonio es la segunda decisión más importante de tu vida. Te casas bien y tendrás bendición, te obstinas y tu vida será un infierno en la tierra. La decisión está a un paso y ese paso se llama OBEDIENCIA.

Texto de estudio:
  • Deuteronomio 1:41-45
  • Deuteronomio 11:26-28

Ahora en tus notas, escribe lo siguiente que Dios te haya hablado :
1. Promesa
2. Mandamiento
3. Desafío personal

 

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